El fondo temático de este proyecto (si es que acaso puede hablarse de un tema) es la recolección de objetos que perdieron su valor original, circunstancial o deliberadamente, para ser manipulados por el artista. Un ejercicio, en definitiva, de reconocimiento con el lugar que se habita. Con soportes aparentemente tan disímiles como cajas, marcos y maletas encontradas en sus recorridos por la ciudad de Valparaíso (ciudad pródiga en desperdicios) el autor pretende enraizarse a un itinerario dado por lo azaroso de sus paseos. Ejercicio, por una parte, que pretende hurgar en la memoria de una ciudad, esta tarea, sin mayor finalidad que la de brindar un testimonio de la jornada, es un proyecto que se enmarca dentro de uno aún mayor: el de poder retratar al artista en una permanente búsqueda de las respuestas que proporcionará el olvido. He ahí el material de esta aproximación, que también es arrebato y juego lingüístico. La intención de situar a estos desperdicios, sean recortes de revistas, pedazos de plástico o cucharas, dentro de un marco, es una revisión del automatismo brindado por cierta poesía y del ensimismamiento que vive la población local. (Objetos desechados que, fuera de lugar, realizando el mismo ejercicio, el artista termina por negar, sin dar concesiones, en una obra de arte.)
Recapitulando: el juego lingüístico estaría dado por la forma de titular estas obras que son conjuntos de cosas (o desechos) que de tanto aproximarse terminan por crear un universo. El azar está dado, exclusivamente, por el hecho de haber sido encontrados. Ya que en el taller adquieren la proporción de pieza o elemento. Se mezclan junto a otros objetos y son despojados, nuevamente, de su valor tradicional. Se vuelven manipulables. Se arriman unos con otros. Son un atisbo, en definitiva, de la sociedad de consumo que todo lo desecha.
No necesariamente el resto es lo demás.
Resignificar estos elementos (como dije anteriormente, que han perdido su valor original) sería la tarea del artista en este caso puntual. Brindarles un marco y una referencia. Hacerlos hablar desde el abandono y desde una posterior reutilización que se ciñe a la nostalgia o a la compulsión oblicua de la enfermedad. La intención, en definitiva, es hacer una retrospectiva de aquello que encarna el desecho, así como el deseo en nuestra sociedad.